LA ANÉCDOTA DE LA SEMANA Jornada 18: Atleti 1 - 1 Sevilla C

Pues de nuevo otra jornada desagradable en cuanto al resultado del partido de nuestro equipo, la primera parte fue buena y la segunda para olvidar, pero no por esto en nuestro estadio no iban a dejar de suceder cosas.
Antes de comenzar el partido vemos cruzar por el terreno de juego hacia nosotros a Raúl Bustillos, al redactor y fotógrafo del Sanlúcar Información, venia de hacer sus fotos de rigor de los equipos, y por aquella ocasión había elegido nuestra banda para seguir el partido con su cámara. Raúl andaba por el barrizal despacito, con parsimonia, arremangándose los pantalones y con cuidado de no caerse para no divertir al grupo de cachondos de la Marea.

El Bustillos


Entre lance y lance del juego, nuestra grada se ensaño un poco con uno de los jóvenes jugadores sevillistas, con su lateral derecho que hizo gala de su dureza y sus artimañas pese a su bisoñez, seña de identidad evidente de la buena cantera del Sevilla.
Debido a su parecido físico, enseguida uno de nuestros aficionados le puso el mote o apelativo de Pocholo, la verdad es que el nº 2 era idéntico al ídolo del famoseo rosa.

Pocholo


En la primera parte nuestra afición vibró y disfrutó con el juego del equipo, y en la segunda mitad se sufrió y se vio por momentos como el partido y el resultado peligraba, se acabaron las ocasiones, se jugó mas en nuestro campo y lejos de donde estábamos pero Julio, el Niño de la Mosca nos hizo reír haciendo” la Gaviota”, una nueva interpretación cómica y esperpéntica de su peculiar y divertido show.

La gaviota


Está claro que las cosas no están saliendo como estaban previstas y lo que se presumía una buena temporada, se esta volviendo por el momento en una cosa bastante discreta.
Por lo menos nuestra gente no deja de cantar, de bailar, de innovar con cosillas nuevas y aunque seamos pocos efectivos y no recibamos demasiado a cambio, siempre está por encima lo más grande, el ser y querer a este equipo.

Bailecitos


Al final del partido, cuando surgieron esas esperadas reacciones de los espectadores, unos gritando, otros gesticulando y otros abatidos, resignados y cabizbajos. Por nuestra megafonía a toda voz, el himno del Sevilla F.C., ese del Arrebato.
No sé de quien seria la “buenísima” idea sobre todo en ese momento, o a lo mejor el asunto le pareciese a alguien que tuviese mucha gracia, pero la verdad es que el detalle no le pareció a los contrariados aficionados en ese momento, de demasiado buen gusto.
En fin las cosas de este campo y las cosas de la Leti.