Pues encuentro en el Palmar en esta tarde en la que presumiblemente las predicciones no presagiaban lluvias pero que terminó mojándonos hasta los huesos.
Encuentro muy disputado por ambos contendientes y como suele pasar en esta serie de derbis entre sanluqueños y puertorealeños, ocurrió prácticamente de todo.
Un Sanluqueño que salió decidido y un Puerto Real que poco a poco a base de juego y ambición, fue demostrando de que es un equipo que juega muy bien al futbol incluso en un terreno tan pesado, bien situado y sabiendo muy bien jugar sus bazas
Al poco de empezar, penalti a favor de los de la Villa, internada por la izquierda y derribo claro del extremo, pena máxima que transforma Sergio Berro, Moisés le adivina el lanzamiento pero fue imposible.
Un Sanluqueño animado desde la grada y enrabietado, intenta poner cerco a la portería de Isaac pero siempre mirando de reojo, defendiéndose ordenado y precavido ante las acometidas del Puerto Real. Falta a favor del Atleti que lanza magistralmente como siempre Oscar Silva, y el capitán puertorrealeño Alfonso despeja hacia su portería poniendo la igualada 1-1.
Encuentro igualado y al filo del descanso, en una falta lejana a favor del Sanluqueño, apenas pasados unos metros el medio campo, Chiqui lanza con precisión y fortuna, pues el balón hace un extraño y sorprende por alto a un Isaac más pendiente de los rematadores que del esférico envenenado, 1-2. Con ese resultado y esa ventaja nos iríamos al descanso, en dos jugadas a balón parado habíamos obtenido un premio casi inesperado.
La segunda mitad empezó con una falta de concentración que hizo que el Puerto Real rápidamente igualara la contienda, nuevamente el oportunista Sergio Berro aprovecha un rechace dentro del área 2-2.
De ahí hasta el final pudimos contemplar una segunda parte muy trabajada y luchada por ambos equipos bajo una lluvia muy caladera, un Puerto Real que terminó perdiendo a falta de 15 minutos hasta a dos jugadores expulsados, y un Sanluqueño que aunque lo intentó, no tuvo la habilidad, el acierto y la destreza suficiente para poder perforar de nuevo esa portería.
Se dio entrada a Rubén Pazos, Chico Benítez, a Dani Carrasco, y los de la Villa incluso en clara inferioridad numérica, no renunciaron al ataque y consiguieron consumar un empate yo diría que bastante justo.
No demasiado público, pero buen ambiente en nuestro estadio, mucha animación en la banda de General donde la gente de la Marea se puso chorreando, pero como siempre cantó y se divirtió con sus cosillas y con su manera muy especial de vivir los partidos.
Un nuevo punto para el zurrón verdiblanco y a decir verdad el calendario en esta fase del campeonato se vuelve muy pero que muy exigente. Próximo fin de semana visita al Valle de los Pedroches para enfrentarnos al C.D. Pozoblanco, y luego recibiremos en casa a otro de los equipos con aspiraciones, al Algeciras.
Nuestro equipo ya sabe lo que es ganar en Pozoblanco pues la victoria nos ha sonreído allí en las dos últimas temporadas, esperemos que en esta ocasión se haga bueno el dicho de que no hay dos sin tres.
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